Si hay un productor capaz de darle una vuelta a un género tan tradicional como las series de profesionales, ese es Ryan Murphy. El creador y productor de un catálogo tan excelente como variado en géneros, que incluye Glee, Scream Queens o las sucesivas versiones de American Horror Story, American Crime Story y Feud, se mete ahora en el día a día de un grupo de profesionales entre policías, paramédicos y bomberos que trabajan en la primera línea del teléfono de emergencias 911.
911 es precisamente el título que Murphy y su coproductor habitual Brad Falchuk han elegido para su nueva producción con 20th Century Fox, estudio al que continúan vinculados. La serie llegará en exclusiva a FOX Life a partir del próximo 25 de enero, a las 22:10 horas, sólo unos pocos días después de su estreno en Estados Unidos, previsto para el 3 de enero.
911 traslada al espectador la presión que supone trabajar para un servicio de emergencias, donde a diario hay que lidiar con todo tipo de situaciones, algunas de ellas más cotidianas, como pequeños accidentes de índole doméstica, y otras mucho más peligrosas e inesperadas, hasta el punto de que la ansiedad hace mella en los integrantes del servicio, sometidos a una gran tensión, no sólo física, sino emocional.
La serie sigue el día a día de estos profesionales, en el trabajo y también en su vida personal, donde a menudo se trasladan sus frustraciones. Hasta aquí nada nuevo, aparentemente. Pero la capacidad creativa de Murphy dota de altos vuelos a un argumento que en sus manos y en las de un reparto de estrellas eleva la serie a cotas mucho más altas y demuestra que lo que el argot televisivo conocemos como procedural de corte clásico puede tener mucho que aportar a la ficción de hoy.
Prensa
