La serie está centrada en la familia Rafter: Dave, Julia y sus tres hijos, Rachel, Ben y Nathan, quienes se enfrentan a diario a las presiones en el trabajo, los problemas sociales y sus relaciones. En la temporada anterior, vimos como el día de la víspera del veinticinco aniversario de su boda, la pareja pensaba que por fin van a poder disfrutar de la casa para ellos solos, después de haber criado ya a sus tres hijos, y haber conseguido que cada uno tenga su propia vida, con sus casas, sus trabajos, sus familias? Sin embargo, a causa de unos problemas imprevistos que les surgen a cada uno de los tres, el hogar paternal se convierte de nuevo en el refugio de toda la familia.
Dave y Julia trabajan en una pequeña empresa de electricistas, donde Julie es contable y Dave, uno de los miembros más antiguos de la empresa y el electricista más experto del equipo. Están los dos bien de salud, tienen algún dinero en el banco y, después de que Ben, el único hijo aún vive con ellos, anuncie que va a cambiar de casa, la pareja respira de alivio. Finalmente podrán tener tiempo para ellos, y tal vez hacer aquel viaje romántico tanto tiempo aplazado, o darse unas largas vacaciones?
Y mientras Dave y Julie se dedican a hacer planes de futuro para los dos, ¡De pronto la casa se vuelve a llenar! En menos de 48 horas, todos sus sueños de libertad se suspenden indefinidamente a medida que toda la casa vuelve a acoger a todos sus hijos: primero llega Nathan con su mujer Sammy (Jessica McNamee), una auténtica princesa; después, por si no fuera suficiente, aparece Rachel, arrastrando muchísimos problemas con su novio Daniel (Luke Pegler). Por último, los Rafters tendrán que acoger también a Ted, el padre de Julie, un hombre que necesita muchos cuidados ya que es muy vulnerable emocionalmente.
En esta nueva temporada, Los Rafters vuelven con muchas cuestiones pendientes de la temporada pasada que deberán ser resueltas.
Jueves 9 a las 22.50h
Jueves a las 22.50h
