«El aire de la cordillera del Himalaya está tan contaminado como el de las ciudades europeas». Este fue el impactante titular que en octubre de 2008 informó por primera vez al público sobre los resultados científicos de las mediciones atmosféricas tomadas a más de 5000 metros de altitud, al pie del Everest. Ante esta situación el techo del mundo ya no era el paraíso puro, que tan a menudo habíamos imaginado. Tras el descubrimiento de una enorme nube de contaminación sobre el Océano Índico, un equipo franco-italiano reveló sorprendentes niveles de concentración de partículas contaminantes en un área tan virgen como las más altas cumbres del Himalaya. Las nubes no conocen fronteras… pero la ciencia está trabajando para solucionar este problema.
Sábado 15, 21:30h
