El serial de Canal Sur dice adiós por falta de presupuesto en la RTVA, que en los últimos años dedicaba en torno a los 5 millones de euros a esta producción. Llegó a tener casi un millón de espectadores andaluces y al cabo de casi doce años de historias, tramas, un millar de personajes y más de 2.000 capítulos, el hotel cierra mañana sus puertas, inclusive las de verdad, porque el equipo técnico de la productora Linze se ha quedado sin trabajo. El recorte de la transferencia de la Junta deja a la cadena andaluza sin mucha cintura para un proyecto de este calibre.
Canal Sur se queda en 2013 sin telenovela de producción propia y a Arrayán le dará este miércoles su despedida en prime time, a partir de las 21.40, con la emisión de cinco capítulos consecutivos en una noche convertida en acontecimiento para una serie que forma parte de la memoria sentimental de tantos andaluces. El productor granadino Eduardo Galdo ha dicho así adiós a este serial que se presentía incombustible y que la crisis, finalmente, también se lo ha llevado por delante junto a tantas cosas. Los estudios de Loasur en la malagueña Coín se encuentran ahora en silencio tras haber concluido las grabaciones en el mes de noviembre. Actores como Paco León o Mariano Peña antes de ser conocidos por Aída ya estuvieron alojados en el hotel costero donde se revelaron como actrices Remedios Cervantes y Eva Pedraza. Además de este hotel de un lugar indeterminado de la Costa del Sol la propia provincia malagueña se convirtió en Madrid, Mauritania o California, algunos de los lugares en los que durante estos catorce años se desarrolló la historia del establecimiento Arrayán.
La RTVA anunció en verano la conclusión del serial junto a otras medidas contundentes como la desaparición del Canal Sur 2, entre la incertidumbre por el futuro de la corporación cuya financiación ha venido a ser garantizada por el gobierno de la Junta para los próximos años. En esta última etapa de Arrayán el reparto estaba formado por los actores Raquel Meroño, Miguel Hermoso, Zoe Berriatúa, los malagueños Juanma Lara y Pablo Puyol o Ana Rujas, rostros conocidos por producciones de cadenas nacionales.
En esta recta final la jefa del hotel, Teresa Pons (interpretada por la actriz Virginia Nölting), anuncia despidos en la empresa, pero termina siendo asesinada antes de hacerlos efectivos. El inspector Matute (Juanma Lara) investiga lo sucedido e interroga a todos los posibles implicados mientras busca pistas. Estos interrogatorios van a marcar los últimos capítulos sucediéndose y las sospechas son múltiples ya que va descubriendo que todos ellos ocultan algo. El inspector termina enamorándose de Susana (Paula Meliveo) que termina siendo la principal sospechosa de la muerte.
