
Según el gobierno, la ley de estabilidad presupuestaria se está aplicando ya en todas las Administraciones Públicas y empresas estatales, y RTVE no debería quedar al margen de esos esfuerzos. Para ello, resulta imprescindible poner en marcha ya mismo drásticas medidas de ahorro y recorte del gasto que ayuden a frenar el déficit en la casa.
El objetivo sería ajustar de verdad las cuentas en 2014 y para eso es imprescindible volver a recaudar por la emisión de publicidad.
Sindicatos y oposición parecen estar de acuerdo, otra cosa son las privadas, las cadenas se repartían 3.500 millones en 2007; tras cinco años de crisis apenas llegan a 2.000. Un nuevo «jugador» resultaría devastador. También implicaría romper el compromiso que privadamente adquirió el propio presidente del Gobierno con las cadenas antes de llegar al Gobierno.