El Barón Pierre de Coubertin, el padre del movimiento olímpico, propuso este inspirador lema al Comité Olímpico Internacional en 1894.
Su significado es «más rápido, más alto, más fuerte» y perfectamente responde a los retos de los atletas por alcanzar la excelencia en el deporte, inspirándolos a lograr cotas cada vez mayores. Para lograrlo, la historia de los Juegos Olímpicos está plagada de momentos increíbles de superación, récords que se pulverizaron gracias a nuevas técnicas, nuevos modelos de entrenamiento o avances tecnológicos, apariciones estelares inesperadas como la irrupción de Emil Zátopek o la nueva técnica de salto de Fosbury.
Odisea les ofrece algunos de estos momentos mágicos que se han producido a lo largo de la historia de los Juegos Olímpicos, y que responden a la perfección al viejo lema de Pierre de Coubertin.
Lunes 9, 22:00h | Martes 10, 2:00/15:00h
N.P