
En las tranquilas montañas del Jura, al norte de Suiza, se puede escuchar el rugido de los motores. Entre sus verdes colinas viven Urs Erbacher, su esposa Verónica y su extraordinaria familia de mecánicos y corredores de coches y motos, todos ellos entusiastas de los vehículos tuneados. Desde Arlesheim, el diminuto pueblo de 9.000 habitantes, Urs y su alocado equipo se dedican a la construcción de motocicletas personalizadas y a regentar el bar más “cool” de moteros de todo el país.
En "Reyes del turbo" veremos cómo Urs y su poco convencional familia compaginan su afición por las carreras de motos y coches extremas con un próspero negocio. Cada episodio, lleno de drama, risas, rivalidad y amistad, nos muestra el negocio de mayor crecimiento del mundo. Para costear su pasión, ya que se trata de un deporte amateur en Europa, la familia Erbacher construye motocicletas únicas para aficionados adinerados. A ellos se deben las motos más espectaculares que se han fabricado en Europa y mejor equipadas, ya que lo que aprenden en las carerras lo aplican a estas piezas.
Cuando era un adolescente, Urs Erbacher tenía un sueño: derrotar a los Alfa Romeos que corrían en su ciudad natal de Basel, al noroeste de Suiza. Para un modesto hijo de panadero, este era un reto importante y lo logró aunque al volante de un Volkswagen escarabajo de 34Cv. Para ello, aumentó cuatro veces la potencia del motor de este sencillo vehículo. Este fue el comienzo de una apasionante vida dedicada a las carreras.
El loco mundo del Drag Racing
El “Drag racing” es la forma más extrema de carreras de motos y coches que lleva la tecnología y el motor de los vehículos hasta el límite. Se trata de experimentar los G’s en el cuerpo del corredor. Ver una carrera de drags en la que los corredores juegan con la muerte es una experiencia increíblemente excitante y explosiva. Pero Urs no tiene miedo. Su objetivo es convertirse en el rey del Circuito Europeo de Drag Racing y así tener la oportunidad de correr en Estados Unidos. Este es el segundo año que se celebra una carrera con un motor diseñado para quemar nitrometano, un combustible mucho más potente que la gasolina, que hace posible que los coches alcancen más de 160km por hora en menos de un segundo. Lo más curioso es que Suiza ha prohibido las carreras de motos durante 52 años, asunto que está siendo sometido a debate en el Parlamento de este país.
Departamento de prensa de Discovery Communications