
Así lo ha confirmado el consejero delegado de Vodafone España, Antonio Coimbra, en una rueda de prensa en la que ha indicado que la intención de la compañía es migrar a los clientes de móvil de Ono, que actualmente mantiene un acuerdo mayorista con Telefónica, a su red «tan pronto como sea posible».
«Hay que mirar y respetar los contratos. Probablemente habrá que negociar y buscar el mejor momento para hacerlo. Ahora, queremos hacerlo tan pronto como sea posible», ha indicado el directivo a los periodistas tras la rueda de prensa de presentación de la compra de Ono por parte del grupo británico por 7.200 millones de euros.
Ono, que utiliza la red de móvil de Telefónica desde 2007 y alcanzó el pasado año un acuerdo con esta compañía para prorrogar el contrato de Operador Móvil Virtual (OMV), tenía a cierre del pasado año 1,08 millones de clientes y es de las operadoras vencedoras en portabilidad móvil mes tras mes, mientras que Vodafone, que acumula unos 14 millones de clientes móviles, perdió 1,36 millones de usuarios en este segmento el pasado año.
Tras la operación, Vodafone se convertirá en la tercera compañía de telecomunicaciones en España con un total de 17,2 millones de clientes entre el móvil y fijo, por detrás de Telefónica, con 24,9 millones de clientes, y por delante de Orange, con 14,4 millones.
De este modo, Vodafone no hará ningún cambio hasta que se complete definitivamente la compra, algo que la compañía estima que ocurrirá en el tercer trimestre de 2014. De no alcanzar ningún acuerdo con Movistar, Vodafone tendría que mantener su cobertura durante varios años, ya que el acuerdo entre ONO y Movistar fue renovado recientemente.
Asimismo, Vodafone tiene planeado conceder acceso al 4G a los clientes móviles de ONO. No obstante, todavía deben decidir si rompen el acuerdo con Movistar o esperan a que expire el contrato.