Extreme emite la sobrecogedora «Última sospecha»

Ruby (Leelee Sobieski) y su hermano menor Rhett (Trevor Morgan) pierden a sus padres en un terrible accidente de coche. Tras la trágica desaparición de sus progenitores, los mejores amigos de éstos, Erin (Diane Lane) y Terry Glass (Stellan Skarsgard), se convierten en sus tutores. Ruby y Rhett reciben la promesa de un mundo de riqueza y diversión en California. Todo lo que deben hacer es mudarse a una llamativa casa de amplias cristaleras en Malibú. Pero pronto, Ruby comienza a sospechar que Erin y Terry puede que no sean los tutores ideales que pretenden ser. Pero… ¿son sus sospechas justificadas o, meramente, producto de la fértil imaginación de una adolescente rebelde? Este film consigue generar una buena dosis de suspense y emoción a pesar de su predecible argumento, y es innegable el atractivo de su fuerte elenco. Diane Lane y Stellan Skarsgaard como los enigmáticos tutores se mantienen en borde mismo de la sobreactuación, logrando una intensidad inusitada que favorece mucho a la película. La joven Leelee Sobiesky muestra su talento en manos de un buen director y entrega una convincente actuación como la adolescente dolida que sospecha (tal vez sin fundamento) de la honestidad de los adultos.