Canal+ estrenará en exclusiva el próximo 15 de marzo, y en simultaneidad con su estreno en EE.UU., la serie «The Pacific», lo nuevo de Steven Spielberg y Tom Hanks.
La mini-serie, de diez horas de duración, ha costado 250 millones de dólares (unos 173 millones de euros) y es la más cara de la historia de la televisión, cuenta las vicisitudes del primer frente abierto por los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial: Guadalcanal, en el que se enfrentaron al ejercito japonés.
Sus responsables, el actor Tom Hanks y el realizador Steven Spielberg, fueron los más solicitados por los periodistas, ansiosos por saber que podía esperarse de la nueva incursión en el género bélico de los que en su día hicieran realidad Hermanos de sangre, la serie que seguía la trayectoria de la primera compañía que combatió en las costas de Normandía.
«La diferencia básica entre The Pacific y Hermanos de sangre es que en la segunda nos basamos únicamente en el magnífico trabajo del escritor Stephen Ambrose mientras que en la primera mezclamos tres obras distintas de tres hombres distintos, veteranos que habían combatido en el Pacífico: Eugene Sledge, John Basilone y Robert Lockie. Los tres eran aproximaciones desde puntos de vista distintos y eso se nota mucho en la serie» decía Hanks.
«A nivel estilístico The Pacific no tiene nada que ver con Hermanos de sangre o Salvar al Soldado Ryan. Los colores son mucho más vívidos, más contrastados. Cuando hiceRyan me basé en las pocas fotografías disponibles de Bob Cappa y en los testimonios de los veteranos. Hicimos lo mismo en esta ocasión: todos me decían que combatían bajo un cielo azul. Era absurdo tratar de visualizarlo como si fuera Normandía» aclaraba Spielberg ante las insistentes preguntas de la prensa estadounidense acerca del look de la serie.
En la media docena de episodios de The Pacific que se pudieron ver en Pasadena (donde la cadena norteamericana HBO presentaba ayer su programacion para 2010) chocó su -inesperada- brutalidad, la brillantez de sus actores y el impresionante equilibrio entre las escenas más intimistas (que recuerdan sobremanera a La delgada línea roja, del realizador Terrence Malick) y la visualización del combate. Para terminar Hanksconfesó la auténtica razón por la que él y su socio Spielberg produjeron la serie: «nos llamaron de HBO y nos dijeron que tenían 250 millones de dólares. Nos preguntaron si nos los queríamos reventar y dijimos que sí. Qué menos, ¿no?» exclamó el actor entre carcajadas.
El País