Este mes nos adentramos en la caza de dos especies apasionantes: La becada y la agachadiza o becacina. Especies emparentadas y muy similares aunque de tamaño claramente diferente, son debido a su carácter migratorio difíciles de cazar e impredecibles. Un caza sujeta a los vaivenes de la meteorología y sobre todo a la labor de los perros en el caso de la becada.
Jóvenes y becaderos
A la sombra de la mayor cadena montañosa de España, los Pirineos, encontramos espesos bosques de roble, pino y boj donde la misteriosa dama del bosque busca refugio de los gélidos inviernos del norte de Europa. Por estos bosques se orientan con soltura nuestros jóvenes protagonistas en busca y captura de esquivas becadas, tarea para la que contarán en todo momento con la imprescindible ayuda de sus cuatro setter ingleses.
Jueves 5 a las 19:00h
Los mil besos de la agachadiza
Escenario de la caza al paso de las agachadizas son los campos y arrozales de Rumania. Luca Lucarini después de la caída del régimen de Ceausescu se dedica a la recuperación de parte de estas tierras para realizar el mejor hábitat para la agachadiza y otras aves. Bellísimos lances con escopeta de pequeño calibre y panoramas sugestivos nos acompañaran para disfrutar de una manera distinta de cazar esta difícil ave.
Jueves 5 a las 20:00h