Los fans podrán disfrutar a partir de mañana de los primeros 4 episodios de la serie, que continuará al ritmo de 2 episodios semanales cada martes.
Estos 12 nuevos episodios, que tras los primeros cuatro se estrenarán dos episodios cada martes, dan mucho protagonismo a Genny (Salvatore Esposito), el único superviviente de la dinastía Savastano. Un personaje que se ha despojado de innumerables capas en su propio proceso de transformación, pasando de malcriado hijo de Don Pietro a jefe de familia, marido y padre. En la nueva temporada se encuentra en su mejor momento, precisamente por el bien de Azzurra (Ivana Lotito) y del pequeño Pietro. Con una familia a la que proteger, siente la necesidad de un gran cambio en su vida, comprometiéndose a hacer negocios legítimos lejos del mundo en el que creció.
Sus intereses en Nápoles los traslada a Patrizia (Cristiana Dell’Anna) que, tras haber traicionado y asesinado a Scianel, se ha ganado su posición dentro del clan Savastano. Junto a Genny, ella intentará mantener la paz y, para ello, se apoyará en el clan Levante, una rama de la familia de la difunta Doña Imma. Mientras tanto, Enzo (Arturo Muselli) y Valerio (Loris De Luna), después de haber reforzado su dominio sobre el territorio central de Nápoles, se enfrentan a nuevos retos.
La devastadora muerte de Ciro en el final de la tercera temporada deja un panorama desalentador. Pero Ciro no desaparecerá. Estará tras las cámaras, ya que Marco D’Amore, pasa de ser uno de los protagonistas de la serie a dirigir los episodios 5 y 6. Algo que él define como «un reto en el que hacer frente a las altas expectativas y el sentimiento recurrente de estar confrontado con sus propios límites».
El equipo de directores de la temporada lo completan Francesca Comencini, que también actúa como supervisora artística en los primeros 4 episodios; Enrico Rosati y Ciro Visco, ambos asistentes de dirección en las temporadas anteriores, que dirigirán los episodios 7-8 y 9-10 respectivamente; y Claudio Cupellini, otro veterano director de la serie que dirige los dos últimos episodios.
«En esta temporada, los protagonistas navegan por nuevos mundos y sentimientos con los que no están familiarizados y que no pueden controlar. Intentan adquirir nuevas identidades y escapar de sus raíces. Hay un sentido de constante cambio entre la transformación y la ruina», afirma Francesca Comencinie.
Desde martes 23
