Para la revista Rolling Stone, Aretha Franklin fue (y sigue siendo) la mejor cantante de todos los tiempos. Tocó el cielo en este concierto que ofreció en el año 1972 en una iglesia baptista de Los Ángeles y en el que no faltó Mick Jagger entre un público que estaba enloquecido y entregado.

Este concierto es una joya que ha visto la luz cuarenta años después de ser grabado. Tras publicar ‘Lady Soul’ (1968) o ‘Aretha Now’ (1969), Aretha sorprendió acudiendo a este templo a grabar un álbum de gospel que se convirtió en el más importante de su género. Fue Sydney Pollack el encargado de grabar este ‘Amazing Grace’, un concierto cuyo material se creía perdido hasta la muerte del director en 2018. ‘Amazing Grace’ fue el disco más vendido de Aretha y estas imágenes forman parte de su enorme legado.
Domingo 23 a las 22.00h

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